Como pudimos ver el pasado 6 de marzo en el webinar programado por EFPA España, el factoring y el confirming crecen a doble dígito en nuestro país, consolidándose como una clara vía de financiación empresarial.
El servicio para el cobro de facturas de la empresa a sus clientes –factoring– creció un 28,95% el pasado ejercicio, y el confirming -pago a proveedores- elevó su actividad un 29,51%. En total, casi uno de cada cinco euros del PIB español fue cedido y gestionado en operaciones de factoring y confirming, según la Asociación Española de Factoring. En concreto, el importe total de cesiones de créditos superó los 257.000 millones de euros. De esta cantidad, 127.000 millones corresponden al factoring y el resto al confirming.
Jorge Antón, CEO y fundador de MytripleA, explica que “Factoring y Confirming son formas de financiación ágiles, flexibles, que las empresas pueden disponer de manera complementaria a la financiación bancaria. La empresa -pequeña o mediana- debe diversificar sus fuentes de financiación, debe contar con los bancos -¡por supuesto!- pero también es sano, lógico y necesario ampliar el abanico de financiadores de sus facturas o del pago de sus proveedores“.
Confirming, gestiona los pagos a tus proveedores
El confirming supone la obligación de pago de las facturas por parte de la empresa deudora. Esta se obliga a pagar las facturas en un plazo establecido que suele ser de varios meses y, los proveedores están interesados en cobrar anticipadamente esas facturas.
“Cuando inviertes en facturas de confirming estás anticipando el cobro de esas facturas a los proveedores a cambio de una rentabilidad. A la fecha de vencimiento la empresa deudora pagará esas facturas y tú recibirás el capital invertido y los intereses. ¿Qué requisitos le pedimos a la empresa? Una facturación mínima de 30 millones de euros, que tengan al menos 5 años de vida, cuentas auditadas y un Ebitda superior a los 2,5 millones de euros. El plazo medio de pago suele ser de 90 días. Algo muy importante es que no consume CIRBE bancaria ni para el pagador ni para el deudor, y esto es algo cada vez más apreciado por las empresas”.
Factoring, anticipa las facturas de tus clientes
La salud financiera de una empresa depende, en gran medida, de la rapidez con la que los clientes abonen sus facturas. Contar con una gran cantidad de las facturas sin cobrar puede lastrar la liquidez de cualquier pyme y perjudicar la continuidad de su actividad. Por ello, muchas empresas recurren al factoring.
Desde MytripleA, José Antón cuenta que “Cuando inviertes en facturas de factoring estás anticipando el cobro de esas facturas a la empresa cedente a cambio de recibir una rentabilidad. A la fecha de vencimiento la empresa deudora pagará esas facturas y tú recibirás el capital. ¿Qué les pedimos a las empresas? Entre otros requisitos, que tengan una facturación mínima de 2 millones de euros, que estén al corriente de pago en la AEAT y la Seguridad Social”.
Rentabilidad y riesgo
Jorge Antón explica que la rentabilidad histórica de invertir en esta deuda de empresas es del 4%. Actualmente ronda el 4,54% más el Euribor a 3 meses (2,45% a enero, 2023), es decir, alcanza el 7%. Los riesgos están diversificados en multitud de empresas de tamaño medio y el plazo medio del riesgo es de 90 días.
Bancos, siempre aliados
Cada vez más empresas y cada vez de mayor tamaño deciden diversificar sus fuentes de financiación y financiarse a través de MytripleA, donde encuentran financiación alternativa a la bancaria en forma de préstamos, factoring y confirming. Los bancos son y seguirán siendo el principal financiador de las pymes pero cada vez tiene más sentido incorporar un financiador alternativo que complemente la financiación bancaria. “La crisis de 2008 que fue una crisis de liquidez nos enseñó que es sano, lógico y necesario ampliar las fuentes de financiación. Al igual que la pyme trabaja con diferentes bancos, debe también aportar a su cartera de financiadoras plataformas como la nuestra que, además, está regulada por el Banco de España” señala Jorge Antón, ceo de MytripleA. Apunta además algo muy importante: “todo sin consumir CIRBE ni adquirir productos o servicios adicionales. Financiación flexible, ágil y 100% alternativa”.
