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Nucleares sí, ¡por favor! La nuclear como energía clave contra el cambio climático

Energía

“Es una lástima que haya sido una guerra en el corazón de Europa, en Ucrania, la que haya hecho que tomemos conciencia de la importancia que tiene la energía para la sociedad”, introduce Manuel Fernández Ordoñez, doctor en Física Nuclear y autor del libro “Nucleares sí, por favor. Por qué la energía nuclear es la energía del futuro”, experto protagonista del último webinar organizado por EFPA España, que ha querido poner el foco en este tipo de energía.

La energía es un pilar esencial para el desarrollo, el bienestar y el crecimiento económico. La energía está ligada al desarrollo humano desde el origen de la humanidad”, seguía el autor en su libro. Lo cierto es que desde que estalló la guerra de Rusia contra Ucrania, la generación de energía se ha colocado en el centro del debate. Hablamos de un posible desabastecimiento después de que Rusia cortase el suministro de gas a Europa a través del Nord Stream 2. Hablamos del encarecimiento del recibo del gas, de la luz y del alto coste de la gasolina. E insistimos, al mismo tiempo, en nuestro objetivo de descarbonizar la economía y luchar contra el cambio climático.

¿Para qué se utiliza la energía nuclear?

Manuel Fernández explica las bondades y usos de la energía nuclear: “La utilizamos fundamentalmente para producir electricidad. Es imprescindible en el mix energético: una de cada cuatro bombillas se enciende gracias a la energía nuclear. La energía nuclear responde al llamado trilema energético: asegura el suministro, es sostenible económicamente y es sostenible medio ambientalmente. Es competitiva en costes, ya que reduce la tarifa energética y reduce la dependencia energética al tiempo que que genera empleo estable y cualificado. En Europa la mitad de la energía que se produce es de origen nuclear”.

Tiene además otros usos. La energía nuclear se ha utilizado también para mover submarinos, rompehielos, etc. En medicina para matar a las células cancerígenas y reducir el tamaño de los tumores; en el diagnóstico de imagen, en la exploración espacial, etc. También en agricultura para, por ejemplo, producir nuevas especies de semillas. Gracias a ella, se pueden detectar fraudes en el mundo del arte. Y podemos sumar y seguir.

¿Cuántas centrales nucleares hay en el mundo?

En el mundo hay 420 aproximadamente, y 50 en construcción. 100 de ellas están en EEUU y otras 100 en Europa. En España nos quedan siete operadores nucleares en acción. Tenemos un calendario de cierre y el primer reactor nuclear tendrá que cerrarse en 2027 y el último en 2035. No tendremos centrales nucleares y quemaremos mucho más carbón.

Manuel Fernández Ordoñez, doctor en Física Nuclear y autor del libro “Nucleares sí, por favor”.

En España, las centrales nucleares operativas producen más del 20% de nuestra electricidad. Es decir 1 de cada 5 bombillas en España se enciende gracias a la energía nuclear. “Por tanto, tenemos unas centrales que funcionan, que son seguras y que nos ayudan en nuestros objetivos energéticos y climáticos, y si las quitamos tendremos que sustituirlas por una cantidad equivalente de electricidad que no tenemos”

¿Es seguro generar energía nuclear?

Según Fernández Ordóñez, “la energía nuclear es la forma más segura de generar electricidad junto con la energía solar; es más segura incluso que la eólica. Además, paga el coste de los residuos que genera por ley, así lo dice el Boletín Oficial del Estado”.

Cada día que pasa las centrales nucleares son más seguras: “La locura es no mantener las centrales que tenemos y que producen el 20%. La locura es hacer caso a algunos falsos mitos que aún muchos utilizan como slogan para los atacar a la nuclear.

¿Cuáles son esos falsos mitos antinucleares?

Hay una larga lista: las centrales nucleares provocan cáncer; se utilizan para fabricar bombas; Fukushima ocasionó 200.000 muertos; Chernobil es un desierto nuclear; las renovables y la nuclear son incompatibles; no tenemos suficiente uranio; la energía nuclear emite mucho CO2, etc.

La energía nuclear cuenta con sus propios ‘mitos’, que Manuel Fernández se encarga de derribar.

Durante muchos años, explica Manuel Fernández Ordoñez, “las voces antinucleares han trasladado un mensaje contundente acerca de que las centrales nucleares emitían CO2, lo cual es una obviedad. El problema es que en sus discursos se olvidaban de que el resto de las tecnologías (incluidas las renovables) también lo emiten y, en muchos casos, mucho más que la energía nuclear. Por tanto, la energía nuclear es un aliado fundamental en la lucha contra el cambio climático.

¿Chernobil es un desierto nuclear?

Fukushima no ocasionó miles de muertos, como mucha gente sigue creyendo en la actualidad. De hecho, por el momento no ha ocasionado ninguno y ya han pasado 12 años. Tuvo grandes consecuencias medioambientales y económicas pero no radiológicas”. En cuanto a Chernobil, el autor del libro “Nucleares sí por favor” cuenta que estamos hablando de una central nuclear que sería ilegal en cualquier país occidental, con un diseño deficiente, con fallos de seguridad obvios que todo el mundo conocía, y aun así seguía operando. “La energía nuclear lleva injustamente pagando el estigma de Chernobil durante décadas, cuando las centrales nucleares que tenemos en Europa no se parecen absolutamente en nada. Si Chernobil es algo es una oposición al comunismo y no a la energía nuclear”.

Manuel Fernández Ordoñez señala que “la energía nuclear es la energía del futuro. Otra cosa es que en España decidamos seguir con el calendario de cierre de algunas de ellas, lo cual sería un error. Como lo es el cierre de nucleares en Alemania o lo fue en Japón tras Fukushima. La nuclear es un instrumento para caminar hacia economías más bajas en el uso del carbón. El fin es descarbonizar la economía y la energía nuclear es una energía más, como también lo es la biomasa, la fotovoltaica, el hidrógeno o la eólica.

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