La empresa familiar puede ser un gran legado… o una fuente inagotable de conflictos. Separar los lazos familiares de la gestión empresarial, manejar disputas entre generaciones y garantizar una sucesión ordenada son algunos de los retos clave a los que se enfrentan estas compañías.
En este webinar organizado por EFPA España, Eduardo Estévez, director de la Asociación de Empresa Familiar de Castilla y León, abordó de forma clara y directa los desafíos más comunes de la empresa familiar y cómo enfrentarlos con éxito. Desde la lucha de poderes entre padres y hermanos hasta la intervención de asesores externos, pasando por la difícil decisión de vender o seguir adelante. Aquí resumimos algunos consejos que compartió entre los miembros certificados de EFPA para asegurar la continuidad y el buen funcionamiento del negocio.
Cómo sobrevivir en la empresa familiar
“En la empresa familiar conviven relaciones personales con decisiones empresariales, y mezclar ambos planos no es bueno ni para la familia ni para la empresa. Saber equilibrar estos vasos comunicantes es la base del éxito o el fracaso de las empresas familiares”. Así de rotundo y directo es Eduardo Estévez, autor del libro Cómo sobrevivir en la empresa familiar.

Nueve de cada diez empresas en España no tienen un plan de sucesión familiar y solo el 5,8% de las empresas con menos de cinco años han establecido uno. La ausencia de un plan de sucesión pone en grave riesgo la continuidad de las empresas, especialmente las familiares, que son fundamentales para el tejido empresarial español. Su implementación, por tanto, es una necesidad imperiosa para asegurar que las compañías puedan superar de manera efectiva los cambios generacionales sin comprometer su competitividad ni su legado.
¿Cuáles serían los “mandamientos” en el plan de sucesión familiar?
Cada miembro de la empresa y de la familia debe encontrar su lugar y su papel dentro del complejo ecosistema de la empresa familiar. Es clave manejar de manera óptima tanto las emociones como la gestión y, ¡lo más importante!, inspirar pautas para encontrar la felicidad en la empresa familiar. Eduardo Estévez señala una serie de puntos clave:
No hay recetas mágicas y distintas posiciones pueden llevar al éxito.
“No existe una varita mágica en la empresa familiar. Huyan de consultores y asesores que les prometan la tierra prometida y confíen solo en aquellos que les digan la verdad”, advierte Estévez, y añade: “Incluso posiciones antagónicas pueden ser válidas para el éxito de la empresa familiar. Lo importante es determinar la misión, establecer la estrategia y enfocar las acciones y decisiones en ella”.
Habrá problemas por resolver: ¡sea prevenido!
Estévez insiste: “Lo más importante es anticiparse a lo que vendrá. Si un empresario de verdad desea que la obra de su vida le sobreviva, debe ser consciente del arduo trabajo que tiene por delante. A nivel de gestión, todos lo saben; a nivel familiar, seguramente también. La diferencia es que la buena gestión empresarial es evidente para todos, mientras que la gestión familiar no siempre lo es”.
Si quiere, no se marche, pero deje espacio
“Los de arriba deben hacer el esfuerzo de enseñar el camino y dejar hacer. Los de abajo deben querer aprender y hacer. Ambos deben ser generosos”, explica Estévez en su libro.
Haga que la empresa familiar gane dinero: será más sencillo mantener la unidad familiar
“Si la empresa no gana dinero, el esfuerzo por mantener la comunión familiar será infinito”.
Si le cuesta ser generoso, ¡venda!
“Sin generosidad, la empresa familiar morirá con su fundador. Si no podemos mantener la unidad familiar en el proyecto empresarial, al menos asegurémonos de que continúe la actividad económica y los empleos”.
Déjese ayudar
“Llegará un momento en el que el propio fundador será quien limite el crecimiento de su empresa, porque es imposible saberlo todo y estar en todo. Hay que ser humildes y reconocer que necesitaremos la ayuda de personas con mayor conocimiento que nosotros a lo largo de nuestra vida empresarial”.
Empresa familiar: olvídese de elegir entre familia y empresa
“Dedique tiempo a ambas y será más feliz. Viva el momento y planifique lo que sea posible. Quien hace lo que puede, nunca fracasa”.
No está solo
Eduardo Estévez enfatiza este punto: “Aproxímese a las asociaciones de empresa familiar; allí todos son como usted, viven y sueñan con las mismas cosas. No importa el tamaño de la empresa ni el de la familia. Todos se ayudan, hay que estar”.
No se obsesione con la empresa familiar
“Se pueden prevenir muchas situaciones, pero no todas”. Aquí, Estévez hace referencia al pulper, un recipiente con una hélice en su parte inferior donde se mezclan los ingredientes básicos para la creación de la pasta de papel. “Lo que entra en el pulper en su forma original, desaparece por completo”.
En definitiva, no existen varitas mágicas ni pócimas milagrosas: “Solo cabe prevenir, no existe una solución absoluta… salvo el pulper”.