Nuestra imagen habla antes que nosotros, así que imagínate esto: entras a una reunión o evento. Sientes las miradas de todos sobre ti antes de decir una sola palabra. ¿Qué estás diciendo con tu imagen? ¿Qué dice de ti?
En el pasado webinar organizado por EFPA España titulado La imagen profesional como herramienta estratégica de comunicación, Elena Sanz Belenguer, asesora de imagen personal y corporativa y experta en comunicación, compartió tres razones por las que las personas deben cuidar su imagen, tanto en lo personal como en lo profesional. Este es su resumen.
Más del 80% de tu imagen la proyectas en el trabajo. ¿Estás marcando la diferencia con una mentalidad basada en la excelencia? Hay estudios que demuestran que la primera impresión define la percepción futura hacia nosotros. Y en este juego, no hay segundas oportunidades. Entonces, déjame preguntarte: ¿eres consciente de la imagen que proyectas? ¿Mereces la imagen que proyectas?
Si no te valoras, no te valoran
Vivimos en un mundo visual. Antes de escucharte, te observan. La neurociencia ha demostrado que nuestro cerebro decodifica la imagen de inmediato. Así que deja de fijarte en cómo son los demás o visten los demás y céntrate en ti. Tu imagen profesional va más allá de un traje de chaqueta, unos tacones o una corbata. La forma que tienen las prendas, cómo te sientan, los colores que utilizas, la forma en peinas, mueves y gesticulas, todo cuenta. ¿Te has detenido a pensar si la imagen que proyectas refleja tus talentos y valores? Esto no es superficialidad; es una ventaja competitiva.
Diferénciate: vestir con estilo y elegancia no depende de llevar marcas o tener dinero
En mis charlas siempre digo: “Si te diferencias, sorprendes; si sorprendes, cautivas; y si cautivas, vendes”. Superar expectativas crea un recuerdo duradero en el cerebro de los demás, posicionándote en el nivel más alto gracias al “efecto halo”.
Los colores que usas, combinados con tu tono de piel, cabello y ojos, pueden proyectar una imagen más jovial y dinámica, o más seria y distante. Incluso tu forma de caminar transmite mensajes: un paso lineal aporta seriedad, mientras que caminar a una velocidad media-alta proyecta dinamismo y ejecución.
El lenguaje de las prendas está conectado con el neuromarketing, porque las líneas y formas que provocan las costuras tienen mucho poder sobre tu imagen y eso lo desconoce la mayoría, y las formas de las prendas y cómo influyen en tu lenguaje no verbal.
Cuidar tu imagen mejora tu actitud y productividad
Ser consciente y saber gestionar adecuadamente tu imagen incrementa tu autoestima y autoconcepto. Cuando te ves impecable y sabes que otros te perciben así, tu seguridad aumenta. Las personas aprenden con el ejemplo. Si tus compañeros notan una mejora, muchos seguirán tu ejemplo, mejorando su reputación e impacto, y otros simplemente se sentirán más cercanos a ti. Porque no se trata solo de serlo, sino de parecerlo. Enviamos muchos mensajes inconscientes que son cruciales para construir una opinión potente de nosotros mismos.
En resumen, aprender a gestionar tu imagen te ayudará a proyectarte en la dirección correcta. Hoy en día, es notable la demanda que tengo de clientes individuales así como de empresas que quieren transmitir estas herramientas a sus equipos y a sus líderes, porque son conscientes de su efectividad en la comunicación corporativa y en la carta de presentación de los trabajadores que sea coherente con los valores que representan.