A medida que nos adentramos en un entorno de cambios, donde la inteligencia artificial cobra cada vez más relevancia y los nuevos marcos regulatorios son inminentes, la asistencia a las Jornadas de Asesoramiento Financiero organizadas por EFPA España se vuelve más crucial. Con motivo de la próxima jornada, que se llevará a cabo este miércoles 16 de octubre en San Sebastián, conversamos con Josep Soler, consejero ejecutivo de EFPA España y encargado de inaugurar el evento, quien aprovecha para poner en valor la necesidad de acercar el ahorro hacia el mercado de capitales.
¿Qué importancia tiene este tipo de jornadas para los profesionales del asesoramiento financiero en España?
La importancia de estas jornadas territoriales organizadas por EFPA debe enmarcarse en los profundos cambios que actualmente rodean la profesión del asesor financiero. No solo debemos adaptarnos —y estamos en proceso de hacerlo— a los cambios que traerá la inteligencia artificial, sino que, a medio plazo, habrá también transformaciones regulatorias muy significativas. Estos cambios no solo reforzarán la relevancia del asesoramiento financiero, sino que también plantearán grandes retos que es fundamental abordar y comunicar de manera constante al resto del sector.
En la jornada de asesoramiento se van a tratar temas de interés como la IA, las finanzas conductuales, la importancia de la ESG, entre otros. ¿Qué temáticas son las que más preocupan actualmente a los asesores financieros? ¿y a los inversores/ahorradores?
Por supuesto, una preocupación esencial para cualquier profesional sigue siendo generar negocio, actividad y, en consecuencia, crecer en su carrera. Para los inversores, alcanzar sus objetivos financieros es de vital importancia. No obstante, creemos que, en el ámbito del asesoramiento financiero, es crucial hacer un énfasis especial en un aspecto del que, probablemente, tanto los profesionales como los inversores no son suficientemente conscientes: en este momento, el ahorro no se está gestionando de manera óptima ni se está obteniendo el rendimiento adecuado. En Europa continental, destinamos una parte excesiva de nuestro ahorro a productos con bajo rendimiento, como cuentas corrientes, depósitos y seguros de bajo riesgo.
¿Hacía dónde debemos dirigir el ahorro?
Dado que una gran parte del ahorro está destinada al largo plazo, deberíamos aconsejar a profesionales e inversores que tomen mayor conciencia de la necesidad de acercarse al mercado de capitales. Es decir, invertir asumiendo un poco más de riesgo, ya que el horizonte de esos ahorros —a medio y largo plazo— requiere obtener mejores rentabilidades. Por ello, es fundamental que una mayor proporción de estas inversiones se dirija hacia los mercados de capitales, en particular hacia la renta variable.
