La Comisión Europea está en proceso de elaborar un marco jurídico de la inversión minorista que se adapte a las necesidades de los consumidores, fomente su participación en los mercados de capitales, y contribuya, de esta manera, a un mejor funcionamiento del mercado. Las medidas que se incluyan en esta iniciativa permitirán garantizar un nivel de confianza necesario para que aumente el nivel de participación de los inversores minoristas en los mercados de capitales de la Unión Europea.
Como continuación al Plan de Acción sobre la Unión de los Mercados de Capitales de septiembre 2020, la Comisión ha lanzado una convocatoria de datos para una evaluación de impacto sobre la iniciativa de un paquete de reformas de la regulación de la inversión minorista.
Evaluación sobre la protección de inversores minoristas
El objetivo de la evaluación convocada por la Comisión Europea es analizar si las normas incluidas en MiFID II, el Reglamento KID relativo a los PRIIP y la IDD, en particular sobre el análisis de idoneidad y adecuación, asesoramiento y divulgación, son eficaces para la protección de los inversores minoristas.
Además, se examinará la pertinencia del marco actual para la protección de los inversores y la coherencia entre la legislación sectorial y otros actos legislativos de la Unión Europea, y si la intervención de la Unión Europea estaba justificada.
Retos planteados
Tras las pruebas preliminares realizadas, la Comisión Europea concluye que los consumidores no se benefician lo suficiente de los mercados de capitales, particularmente en lo que respecta a satisfacer sus necesidades de jubilación.
Los niveles insuficientes de cultura financiera, así como el exceso de información de los productos o su complejidad provocan dificultades a los inversores minoristas en la toma de decisiones correctas en materia de inversión. Del mismo modo, la configuración actual de la remuneración de los asesores o las estructuras relacionadas con los costes de los productos provocan una baja fiabilidad en el asesoramiento a los consumidores.
En cuanto a la digitalización, la Comisión Europea considera necesario que la estrategia de protección de los inversores minoristas se adapte al creciente uso de medios digitales por parte de este sector. Por ello propone, entre otras cuestiones, contribuir en el desarrollo de herramientas digitales que puedan beneficiar a los inversores minoristas.
Principales objetivos y medidas de actuación
Ante los problemas detectados, la Comisión Europea traslada la importancia de mejorar la confianza de los consumidores en los mercados de capitales para salvaguardar su protección, y propone preparar a los inversores minoristas para que tomen las decisiones de inversión que más se ajusten a sus necesidades, así como adaptar el marco de protección de los inversores al entorno digital.
Para ello, la Comisión Europea considera necesario incrementar la cultura financiera mediante el refuerzo de los actuales regímenes de información y mejorar las normas profesionales por las que se rigen los asesores con el objetivo de abordar los conflictos de intereses existentes en los procesos de asesoramiento. Además, se plantea cambiar el enfoque de las evaluaciones de conveniencia e idoneidad, de modo que no estén centradas en el producto sino en el cliente.
Finalmente, la Comisión Europea reconoce la necesidad de simplificar y asegurar la coherencia de las normas con los instrumentos legislativos sectoriales, y plantea la posibilidad de llevar a cabo actuaciones no legislativas destinadas a incrementar la participación de los inversores minoristas en los mercados de capitales.