A estas alturas seguro que todo el mundo ha oído hablar de las criptomonedas y en especial de los Bitcoins.
Lo cierto es que tanto la prensa escrita como la televisión se hacen eco de la exponencial revalorización que está teniendo su cotización. Últimamente, también hay que decirlo, con algunas dosis de fuerte volatilidad.
Bitcoins y tulipanes: las mayores burbujas financieras
Seguro que todos recordamos las últimas burbujas acaecidas, como la burbuja inmobiliaria o la burbuja punto-com, entre otras. Pero ninguna de ellas es comparable con el incremento desorbitado del precio que está asolando la cotización del Bitcoin.
Podríamos decir que estamos ante una de las mayores burbujas de toda la historia financiera. Podría compararse con la espectacular “locura de los tulipanes”, que tuvo lugar en la Holanda del siglo XVII. Allá por el año 1623, el precio de un simple bulbo de tulipán de la especie exótica “Semper Augustus” llegó a contratarse por 6.000 florines (es decir, el equivalente al valor de una casa de la época).
No obstante, hay que decir en defensa del vegetal que, al menos, un bulbo de tulipán es un bien tangible, que se puede tocar y poseer, pudiendo llegar a florecer y generar una hermosa flor. En cambio, ¿qué podemos hacer con un Bitcoin? La respuesta es: Actualmente, en la práctica, ¡Nada!
Motivos que me hacen desconfiar del Bitcoin
Estos son algunos de los motivos por los que no invertiría mi dinero en Bitcoins.
1/No hay respaldo regulatorio fiable
En mi opinión el Bitcoin, que como sabemos, no está respaldado por ningún banco central ni Estado, no reúne las condiciones mínimas para ser considerado un adecuado activo de inversión, es decir:
- No se puede utilizar como instrumento de cambio a modo general
- No tiene la característica para ser calificado como valor refugio
- No genera renta alguna.
Ahora bien, lo cierto es que recientemente el Bitcoin ha comenzado a cotizar en el mercado de futuros de Chicago, y ya comienzan a existir fondos de inversión dirigidos a inversores cualificados que invierten en criptomonedas; lo cual les otorga un atisbo de oficialidad. Veamos cómo va evolucionando todo esto…
2/ Su valor no es tangible y es muy volátil
Aunque la cotización del Bitcoin se acercó recientemente a los 20.000 dólares (USD), anotándose una revalorización espectacular de más del 2.000% interanual; hay quien piensa que su valor puede pasar a ser cero en pocos segundos. Yo también comparto esa opinión.
Eso en lo que respecta al riesgo de mercado que subyace de su cotización. Porque en lo relativo al riesgo operacional vinculado a su seguridad, hay que hacer mención a las posibles contingencias derivadas por pérdida, o incluso robo, de bitcoins por parte de ciberdelincuentes; circunstancias nada infrecuentes últimamente.
3/Su situación de incertidumbre absoluta
También hay quienes opinan que esto del Bitcoin no deja de ser otro fraude piramidal más, en donde es facilísimo ingresar el dinero (el de verdad), y muy difícil de reembolsar.
Nadie sabe a ciencia cierta hasta dónde puede llegar a cotizar un Bitcoin. Quizás pueda llegar hasta el infinito y más allá. Pero lo más probable es que algún día no valga nada. El tiempo lo dirá…
El criterio de inversión que empleemos debe ser consistente con un análisis detallado del activo, y nunca invertir cantidad alguna en algo que no entendamos.
En mi caso, por mucho que he leído y me han explicado sobre el tema de las criptomonedas, la “minería” de Bitcoins, las ICO’s (Initial Coin Offering) y cosas similares… Sinceramente, tengo que reconocer que no lo acabo de entender. Por lo tanto, mi recomendación es evitar colocar el dinero en este tipo de burbujas especulativas. Y si en algún sentido se puede “apostar” en relación al Bitcoin es respecto a su declive (como activo de valor).
Así pues, esperar y ver, y llegado el momento adecuado: a ponerse “cortos”. Eso sí, utilizando un vehículo debidamente regulado y gestionado adecuadamente por una contraparte solvente.
Asociado EFPA – Certificación European Financial Planner (EFP)
Web: Newman-Fincoach
TW: @josepcastro_1