El 2025 llega con importantes retos económicos para consumidores y empresas, marcados por un aumento en los precios de bienes y servicios básicos. Entre ellos, destaca la subida del IVA que afectará tanto al poder adquisitivo de las familias como a los costes operativos de las empresas. Este escenario se complica aún más con el incremento de tarifas en la luz, los alimentos y otros servicios básicos. En este artículo, resumimos algunos de los cambios que impactarán en las finanzas de hogares y negocios.
Subida del IVA en 2025: más presión sobre los bolsillos
El aumento del IVA será uno de los cambios más significativos del año y de forma especial el que afecta a los alimentos. Aunque el porcentaje varía según la categoría de productos y servicios, se espera que este incremento afecte principalmente a los tipos reducidos y generales. Los precios de productos básicos como cereales, aceites y lácteos seguirán en alza. Productos como la pasta y los aceites de semillas (girasol, soja o colza) pasan del 7,5% al 10%, mientras que básicos como el pan y los huevos regresan al 4%, tras haber estado en el 2%.
Incremento de la tarifa de la luz
Otro de los cambios más significativos será el incremento en las tarifas de electricidad. Desde principios de 2025, el IVA sobre la electricidad para los hogares vuelve al 21%, después de haber sido reducido al 10% para los contratos de menos de 10 kilovatios. Este aumento supone un encarecimiento sustancial para millones de consumidores residenciales, lo que se traduce en una mayor presión sobre el presupuesto familiar. El alza en los costos de generación de electricidad, sumado a la desaparición de los topes establecidos en los contratos, augura una subida notable de la factura de la luz, afectando tanto a hogares como a empresas que dependen de este servicio básico.
Nueva tasa de basuras y gravamen a cigarrillos electrónicos
A partir de abril de 2025, todos los municipios deberán cobrar una nueva tasa por la recogida y gestión de residuos urbanos, con un coste estimado entre 165 y 200 euros anuales por hogar, según los criterios de cada localidad. Además, los líquidos para cigarrillos electrónicos y vapeadores, así como las bolsas de nicotina, estarán sujetos a los Impuestos Especiales, igual que el tabaco convencional, lo que incrementará su precio para los consumidores.
Freno a las deducciones en movilidad eléctrica
En cuanto a la movilidad sostenible, los compradores de coches eléctricos ya no podrán beneficiarse de la deducción del 15% en el IRPF, que hasta 2024 se aplicaba a la adquisición de estos vehículos, con un máximo de 20.000 euros. Además, también se eliminará la deducción por la instalación de puntos de recarga en viviendas. Este cambio podría ralentizar el crecimiento del mercado de los vehículos eléctricos y afectar a aquellos que planeaban aprovechar los incentivos fiscales disponibles en años anteriores.
Por otra parte, el tipo impositivo del IRPF que afecta al ahorro pasará del 28% al 30% para aquellos ingresos anuales superiores a 300.000 euros. Esta medida impactará en las ganancias derivadas de depósitos, dividendos, seguros y ventas de inmuebles. Un ajuste que sigue la tendencia iniciada en 2023, cuando el tipo impositivo pasó del 26% al 28%.
Qué hacer para adaptarse
Con este escenario, las familias y empresas deberán tomar medidas para mitigar el impacto de estos aumentos. Los asesores financieros tienen un papel fundamental para guiar a sus clientes a través de este cambio, ayudándoles a adaptar sus finanzas y maximizar sus recursos. ¿Cómo?
- Optimización del presupuesto familiar: Las familias deben empezar por ajustar sus gastos y buscar alternativas de consumo en áreas como energía y alimentación. El consumo responsable y la búsqueda de productos más eficientes son clave para reducir la presión sobre el presupuesto mensual.
- Diversificación de ingresos: Las familias pueden considerar complementar sus ingresos o buscar fórmulas para sacar más provecho de los ahorros depositados en cuentas o depósitos. Las empresas, por su parte, deberán explorar nuevas fuentes de ingresos que les ayuden a amortiguar el impacto de los aumentos de precios.
- Asesoramiento financiero personalizado: Es imprescindible que los asesores financieros diseñen estrategias adaptadas a las nuevas circunstancias, combinando protección frente a la inflación con oportunidades de crecimiento. Esto implicará ajustar carteras de inversión, planificar la optimización fiscal y garantizar que sus clientes puedan hacer frente a los nuevos desafíos económicos y metas propuestas.
El papel de los asesores financieros
La subida del IVA y otros incrementos en precios esenciales colocan a consumidores y empresas frente a un entorno económico desafiante. Sin embargo, con una adecuada planificación financiera y una estrategia bien diseñada, es posible mitigar el impacto de estas subidas y encontrar oportunidades en el nuevo contexto. A través de herramientas como la educación financiera, el diseño de estrategias personalizadas y el seguimiento continuo de las tendencias económicas, los asesores pueden marcar la diferencia.
