Hoy, 19 de noviembre, celebramos el Día de la Mujer Emprendedora, fecha que, entre otros, pone en valor la contribución de las mujeres al crecimiento económico y social, y promueve un entorno en el que no solo se celebren sus historias de éxito, sino que también ponga el foco en las distancias aún por recorrer en cuanto al acceso a financiación, recursos y oportunidades.
Hedy Lamarr, Ruth Handler, Oprah Winfrey, Coco Chanel y Ana Botín son mujeres que han dejado una huella imborrable en el mundo empresarial. Desde Lamarr, que transformó la tecnología con su invención que hoy es la base de tecnologías como el Wi-Fi, hasta Chanel, que redefinió la moda femenina. Todas han roto barreras, innovado y liderado en industrias dominadas históricamente por hombres. Por ejemplo, Ruth Handler cambió la industria del juguete con la creación de Barbie; Oprah Winfrey revolucionó los medios de comunicación con su propia compañía; y Ana Botín se convirtió en la primera mujer en presidir un gran banco en España, liderando la transformación digital de Banco Santander. Y todas comparten un rasgo común: han seguido su propio camino. A ellas, y a miles de mujeres anónimas, les pertenece este día.
Una carrera de obstáculos
A pesar de los logros excepcionales de estas mujeres, entre muchas otras, las emprendedoras siguen enfrentando desafíos significativos. La brecha de género en el acceso a financiación persiste, con estudios que demuestran que las mujeres reciben menos inversión en sus empresas en comparación con los hombres, a pesar de contar con proyectos igualmente prometedores. Además, deben lidiar con estereotipos de género que dificultan este mismo acceso, sin contar con una deficiente conciliación de la vida profesional y personal que hace que las mujeres sean quienes asumen una mayor parte de las responsabilidades familiares, lo que limita su tiempo y dedicación al trabajo y proyectos profesionales.
Estos obstáculos, aunque persistentes, no han impedido que muchas mujeres sigan rompiendo moldes, de ahí la necesidad de seguir reivindicando este día: el Día de la Mujer Emprendedora. Un día establecido para reconocer y apoyar a las mujeres que emprenden negocios, fomentan el liderazgo y buscan marcar la diferencia en el ámbito empresarial, financiero y económico. Pero, sobre todo, un día para crear conciencia sobre la desigualdad de género que persiste en el sector. Un dato para ilustrarlo: según cifras del último informe de ClosinGap, solo el 3% del total de las rondas de financiación fue destinado a startups fundadas exclusivamente por mujeres, mientras que el 82% se dirigió a proyectos liderados únicamente por hombres.
Orígenes y objetivos del Día de la Mujer Emprendedora
Impulsado por Wendy Diamond, fundadora y presidenta de Women’s Entrepreneurship Day Organization (WEDO), este día se reconoce en más de 140 países con el objetivo de inspirar a futuras generaciones de mujeres líderes y fomentar políticas y prácticas que impulsen la igualdad de oportunidades en el ecosistema emprendedor. Solo en España, la participación de las mujeres en la actividad emprendedora es considerablemente menor que la de los hombres. Por ejemplo, hay 1.150.000 mujeres autónomas frente a 2.063.000 hombres autónomos, lo que indica que casi el doble de hombres que de mujeres emprenden por cuenta propia (según ClosinGap).
Hoy, más que nunca, el Día de la Mujer Emprendedora ofrece una oportunidad para reconocer no solo a las grandes figuras, sino también a todas las mujeres que, con determinación y valentía, están construyendo un futuro más inclusivo y diverso en el mundo de los negocios.