Ha llegado. El Black Friday arrasa (lleva toda la semana haciéndolo) en escaparates y, por supuesto, en nuestra bandeja de entrada, despertando algo más que entusiasmo a la hora de descubrir ofertas y sucumbir a descuentos en una amplia gama de productos y servicios. Por lo general, dispositivos electrónicos, ropa y otros artículos populares.
Sin embargo, más allá de ser un fenómeno mundial de compras, pocos son conscientes de que esta celebración no se limita únicamente a rebajas en bienes de consumo. De hecho, el Black Friday también marca el inicio de una oleada de ofertas financieras proporcionadas por los propios bancos, una faceta menos conocida pero igualmente relevante.
Analiza tu situación financiera
Estas ofertas pueden ofrecer a los consumidores la oportunidad de ahorrar dinero o acceder a servicios y productos que, en otras épocas del año, podrían resultar más costosos. No obstante, es crucial analizar nuestra situación financiera en estos días y planificar los próximos meses para evitar caer en el consumismo desmedido y contratar productos que, en realidad, podrían no ser necesarios según nuestras circunstancias. Por esta razón, EFPA España ha elaborado un documento con consejos específicos para aprovechar al máximo estas ofertas y evitar complicaciones financieras.
En primer lugar, busca y compara: que hoy sea Friday no significa que también sea ‘Black’. Es decir, que la oferta sea tal. Es crucial dedicar tiempo a investigar. Hay quienes pueden ’embellecerlas’ para hacer que parezcan más atractivas de lo que realmente son. La investigación detallada te permitirá identificar las ofertas genuinas y evaluar si son realmente ventajosas. Vaya por delante una premisa: es fundamental tener una planificación de las necesidades y seguir el presupuesto asignado, para no caer en tentaciones innecesarias que puedan ser perjudiciales a largo plazo.
Ahora sí, ¿qué más hemos de tener en cuenta?
Black Friday: vigila el uso de tarjetas de crédito
Las tarjetas de crédito con bonificaciones son una de las ofertas más comunes durante el Black Friday, ofreciendo recompensas como efectivo, puntos o millas adicionales para próximos viajes. Sin embargo, es crucial analizar detenidamente las condiciones asociadas. Por ejemplo, una oferta de devolución de efectivo podría tener requisitos de gasto mínimo o limitaciones en la cantidad devuelta. Por ello, es fundamental comprender las exigencias, tarifas y limitaciones asociadas, como pueden ser los depósitos mínimos o los impuestos sobre los beneficios recibidos. Además, es esencial comprender cómo estas bonificaciones se integran en la planificación financiera a largo plazo, para entender si realmente son útiles para nuestro perfil o solamente pueden acarrearnos problemas en un futuro.
Examina detenidamente la letra pequeña
En esta línea, cabe destacar la importancia de revisar la letra pequeña. Ofertas como el aumento de la rentabilidad en depósitos o la reducción de comisiones en servicios de intermediación pueden tener condiciones específicas que deben ser examinadas detenidamente. Supongamos la posibilidad de contratar una oferta de depósito con una tasa de interés variable. Aquí es fundamental comprender los requisitos adicionales, como saldos mínimos o compromisos a largo plazo que podrían afectar a nuestra estabilidad financiera si no se integran estas ofertas en una estrategia económica general.
Ajusta el Black Friday a tus necesidades
Por otra parte, anuncios como la eliminación de intereses en tarjetas de crédito o la supresión de comisiones en préstamos pueden resultar atractivos para aumentar nuestro consumo, pero la clave es la moderación. Resistir la impulsividad y adquirir solo lo necesario es vital. Por ejemplo, una oferta de préstamo sin intereses puede volverse problemática si no se maneja con responsabilidad, llevando a la acumulación de deudas a largo plazo. Esto podría traer problemas a nuestra planificación financiera.
Pregunta si hay impacto fiscal
Lo mismo sucede con los cobros a plazos, los cuales, aunque pueden ofrecer la eliminación de ciertas comisiones, pueden suponer un peligro en los meses futuros a la hora de realizar los pagos mensuales. Además, algunas bonificaciones pueden estar sujetas a impuestos, por lo que es esencial considerar el impacto fiscal antes de aceptarlas.
Consulta con un asesor financiero
Antes de comprometerte con cualquier oferta financiera del Black Friday, considera buscar la orientación de un asesor financiero. Estos profesionales pueden ofrecer una evaluación objetiva de las ofertas disponibles, asegurándote de que se ajusten a tus necesidades y metas a largo plazo. Además, pueden ayudarte a comprender las posibles implicaciones fiscales y anticipar cambios en tasas de interés variables.
En resumen, aunque las instituciones financieras ofrezcan promociones durante el Black Friday, es esencial evaluar cuidadosamente las condiciones, requisitos y posibles riesgos. Recurrir a un asesor financiero antes de sucumbir a las tentaciones de estos descuentos puede ser crucial para evitar riesgos en la estabilidad financiera futura.